El ABC de la medicina interna 2019 Original pdf
La actual generación de médicos hará frente y será parte de cambios transcendentales en la medicina en nuestro país, y no me refiero a la ciencia de la medicina —que sin duda seguirá avanzando—, me refiero a la forma en que esta profesión será practicada por los médicos en los centros hospitalarios.
Nos referimos a la forma en que se practica y está organizada la medicina, se ha resistido al cambio durante muchos años —y esto por múltiples factores que sería muy largo comentar— a pesar de que las circunstancias de morbilidad y mortalidad de la población que atendemos, y por consecuencia del tipo de servicios que ésta demanda, han cambiado y seguirán cambiando de forma importante en los años por venir.
Nos enfrentamos a una “nueva normalidad” y al reto nada pequeño de crear una nueva forma de atender las demandas de salud de la población.
Llevamos años hablando del envejecimiento poblacional y de cómo las enfermedades crónico–degenerativas han reemplazado a las infectocontagiosas, de la pérdida de años de vida saludable por esas enfermedades crónicas, de los avances que la ciencia médica ha alcanzado y que gracias a ello hoy podemos diagnosticar enfermedades y tratar a pacientes que pocas décadas atrás era imposible, hemos sido testigos y víctimas del incremento en los costos en la atención de la salud.
La realidad es que hoy muchos pacientes que atendemos no tienen una única enfermedad, sino que presentan la combinación de muchas condiciones crónicas.
El incremento en el número de distintas enfermedades que presenta cada paciente, explicado en la mayoría de los casos por el aumento de la edad de los mismos, ocasiona la proliferación de distintos especialistas médicos que en grupo tratan al paciente, lo que hace extremadamente compleja su coordinación de una forma efectiva y eficiente.
Cuando estudiamos las tendencias globales de la población y las causas de internamiento de los pacientes en el Centro Médico ABC vemos un cambio hacia más pacientes con mayor complejidad que requieren más recursos humanos y tecnológicos. Pacientes que viven más con más enfermedades crónicas. Los pacientes sin complicaciones o sin comorbilidades son cada vez menos comunes.